Una motociclista de 32 años, vecina de Catriel, obtuvo un fallo favorable en la Justicia Civil de Cipolletti tras haber sido embestida por una camioneta del rubro petrolero que cruzó una intersección sin respetar la prioridad de paso. La sentencia responsabilizó al conductor, a la titular registral del vehículo, a la empresa para la cual el chofer prestaba servicios y a la aseguradora, por las graves lesiones y secuelas permanentes que la mujer arrastra desde el siniestro.
El accidente ocurrió cuando la víctima circulaba en su moto Mondial por la avenida Rawson, en dirección norte. Era un día de rutina: trabajaba como portera y también realizaba tareas domésticas. Al atravesar una intersección en forma de “T”, una Toyota Hilux irrumpió desde la calle Pico Truncado, realizó un giro brusco y le bloqueó completamente el paso. La moto impactó contra el lateral derecho de la camioneta y ella fue proyectada hacia el parabrisas.
Una ambulancia la trasladó al hospital de Catriel y, luego, al Sanatorio Río Negro, donde permaneció internada varios días. Sufrió fractura de muñeca izquierda, traumatismo de cráneo, pérdida de conocimiento y múltiples lesiones. Fue intervenida quirúrgicamente y debieron colocarle una placa, pero su cuerpo la rechazó y requirió una nueva operación. Desde entonces convive con dolor crónico, medicación diaria y limitaciones funcionales que afectan de manera permanente su vida cotidiana.
El juicio por daños y perjuicios comenzó tiempo después. La mujer sostuvo que el conductor no respetó las normas de tránsito y que la camioneta estaba afectada a una empresa petrolera. El vehículo figuraba a nombre de otra persona, quien no respondió la demanda, mientras que la empresa tampoco se presentó y fue declarada en rebeldía. La aseguradora, en cambio, reconoció que había cobertura vigente.
Una pericia accidentológica realizada en el fuero penal determinó que el conductor de la Hilux no cedió el paso y cruzó la avenida sin la debida precaución. En el juicio civil, otra especialista confirmó esa misma mecánica: la moto circulaba con energía propia y se encontró de manera perpendicular con la camioneta, de gran porte, que irrumpió en su trayectoria sin dejar margen para maniobras evasivas. La motociclista golpeó su cabeza contra el parabrisas y cayó al suelo.
La pericia médica concluyó que la víctima presenta una incapacidad física del 30 por ciento, con dolor permanente, pérdida de movilidad y limitaciones para tareas cotidianas. El uso de férulas, la medicación y la imposibilidad de cargar objetos pesados forman parte de sus secuelas.
El fallo de primera instancia responsabilizó al conductor por no respetar la prioridad de paso y extendió esa responsabilidad a la empresa para la cual trabajaba, al ocurrir el hecho en ejercicio de sus funciones. La titular registral fue alcanzada por las previsiones del Código Civil y Comercial. La aseguradora deberá responder en la medida del seguro obligatorio vigente, de acuerdo con la doctrina del Superior Tribunal de Justicia.
La sentencia ordenó una indemnización por incapacidad, daño moral, tratamiento psicológico y gastos médicos futuros. La resolución aún no está firme y podrá ser apelada por las partes involucradas.










