El miércoles debería emitir dictamen la comisión de Diputados, pero el oficialismo quiere que el tratamiento sea con la futura composición parlamentaria. Los proyectos.
(Por Verónica Benaim, para Tiempo Argentino).- Con los resultados que arrojaron las elecciones legislativas el domingo pasado, el oficialismo en la Cámara de Diputados ya se mueve como si fuese 10 de diciembre y el recambio parlamentario fuera un hecho. No obstante, esta semana debe definir junto con la oposición si el tratamiento del Presupuesto 2026 pasará a sesiones extraordinarias.
La fecha emplazada por los bloques opositores para organizar el cronograma de trabajo de la Comisión de Presupuesto y Hacienda se votó en la última sesión del 8 de octubre. Según la mayoría de las voluntades, este martes 4 de noviembre al mediodía se debe emitir dictamen. Sin embargo, ronda el silencio en la Cámara Baja.
Para cumplir con lo votado por el cuerpo legislativo que preside Martín Menem, el presidente de la Comisión, Bertie Benegas Lynch, abrió un canal de recepción de propuestas a todos los bloques, e incluso hasta el jueves evaluaba la posibilidad de volver a hacer un encuentro informal con los jefes de los espacios políticos y el secretario de Hacienda, Carlos Guberman.
Si bien Unión por la Patria confirmó que presentará despacho propio, ningún representante brindó precisiones de la letra chica del mismo. “Nosotros tenemos enormes diferencias, al igual que el año pasado con el presupuesto de Milei. Entendemos que tiene que haber presupuesto, sobre todo porque la forma de ajustar del gobierno es usar la prórroga del vigente desde 2023”, dijo a la prensa días atrás la diputada Julia Strada.
El Frente de Izquierda plantea el rechazo al Presupuesto del Ejecutivo. En tanto, los representantes de la oposición dialoguista de Encuentro Federal, que hasta antes de los comicios presentaban una propuesta alternativa, esta semana brillaron por su ausencia, acaso golpeados por los resultados electorales.
De hecho, en la última reunión informativa, donde estuvo exponiendo el flamante canciller Pablo Quirno –en carácter de exministro de Finanzas– al final del encuentro se vio una baja en la asistencia de todos los bloques y sólo quedaron los diputados del oficialismo presentes.
Fuentes del radicalismo comentaron a Tiempo: «Hay vocación de sacar dictamen, pero si el gobierno no quiere no es muy razonable que saquemos despacho de un presupuesto que finalmente no nos gusta».
Los libertarios y aliados plantean que el Presupuesto 2026 también debería tratarse con las nuevas mayorías, tras el recambio parlamentario, teniendo en cuenta que la reconfiguración de bancas arrojará una foto de “un Congreso equilibrado y funcional a la gobernabilidad”.
La foto actual de la comisión, que integran un total de 49 legisladores, muestra que si la oposición trabaja en sintonía fina puede llegar a tener un dictamen unificado, de mayoría, e incluso avanzar en una sesión antes de que asuman los nuevos legisladores.
El peronismo cuenta con 20 integrantes en la Comisión, frente a seis libertarios puros. Sin embargo, las dudas surgen en torno a qué terminará haciendo el espacio de Miguel Ángel Pichetto y Nicolas Massot.
Según habían dicho públicamente ambos, la propuesta incluía las tres leyes que el gobierno de Javier Milei se niega a aplicar: Emergencia en Discapacidad, Emergencia Pediátrica y Financiamiento Universitario. Teniendo en cuenta el superávit fiscal para 2026, establecían tomar el 0,9% del Producto Interno Bruto (PIB) en lugar del 1,5% estimado por el Ejecutivo. Nadie sabe si esto sigue en pie.
Por otro lado, resta saber qué posición tendrán los legisladores que dependen de los gobernadores, sobre todo tras el encuentro del jueves del presidente Javier Milei con 20 mandatarios provinciales y horas después la insólita salida de los principales interlocutores, Guillermo Francos y Lisandro Catalán.
Lo cierto es que también circulan otras especulaciones, ya que el 30 de noviembre termina el período de sesiones ordinarias en el Congreso por lo que, si no se genera una sesión antes de esa fecha, el despacho podría volverse nulo, se caería.
Y es que según el artículo 63 de la Constitución Nacional, tanto Diputados como el Senado tienen durante 9 meses el control y funcionamiento de la agenda. Esto significa que pueden tratar todos los temas y proyectos de ley que estén debidamente presentados y habilitados para ser discutidos.
Una vez cumplido el plazo, el Poder Legislativo entra en receso y desde ese momento, es el Poder Ejecutivo quien puede mantener al Congreso trabajando a través de una prórroga del período ordinario o de la convocatoria a sesiones extraordinarias. «
El gasto de 2026 no llega al 50% de 2023
Un informe de la Fundación Éforo indicó que la cantidad de dinero que el gobierno de Javier Milei proyecta destinar a los gastos previstos en el proyecto de Presupuesto 2026 no llega a representar ni la mitad de la que se usó en el año 2023. En ese contexto, resulta inverosímil el planteo del presidente de que habrá aumentos en las partidas de educación, salud y jubilaciones.
El informe es un llamado de atención a los legisladores colaboracionistas que en el Congreso negocian con el oficialismo la aprobación del proyecto de Presupuesto 2026 a cambio de unos pocos pesos destinados a las provincias que representan.
Según el análisis de Éforo, la inflación acumulada en los años 2023, 2024 y 2025 rondará el 940 por ciento. Entonces, ese debería ser el nivel de incremento de las partidas en el inicio de 2026 si se quisiera mantener el nivel real del gasto público. Sin embargo, el incremento de las partidas sólo llegará al 411% en promedio, que representa apenas el 43% del gasto que debería realizarse para mantener el mismo poder de compra.










